martes, 13 de diciembre de 2011

Ingresa en un psiquiátrico penitenciario por amenazar de muerte a su vecino tras discusiones por ruido

El Juzgado de lo Penal número 1 de Jaén ha condenado a J.M.C. a ser internado en un centro psiquiátrico penitenciario durante dos años, del mismo modo que le ha impuesto la pena de dos años y tres meses de cárcel por un delito continuado de amenazas y otro de daños después de decir a su vecino reiteradamente que le mataría tras quejarse éste de que le molestaba cuando tocaba la batería.

De este modo, en la sentencia, a la que ha accedido Europa Press, se destaca que el acusado empezó a mantener discusiones con su vecino debido a que J.M.C. tocaba la batería en su domicilio de la calle Doctor Eduardo Arroyo de Jaén sin dejar descansar a la víctima, lo que motivó por parte de ésta la interposición de una denuncia ante el Ayuntamiento de Jaén siendo sancionado el acusado por ruidos.

Así, a partir de ese momento, J.M.C. no cesó de intimidar a la víctima, si bien el 20 de abril de 2011, cuando ésta caminaba en compañía de un amigo por la calle Correa Weglison de Jaén fue abordada por el acusado empujándole a la vez que se volvía y le decía "ojito, te tengo que matar". Además, seis días más tarde, sobre las 11,45 horas, empezó a golpear la puerta de la víctima diciéndole "te voy a matar".

De igual forma, al siguiente mes, el acusado, sobre las 22,00 horas, volvió a golpear la puerta a la vez que intimidaba a su vecino con matarlo queriendo entrar en su domicilio. Sin embargo, ante la imposibilidad de ello, debido a que la puerta es blindada, el acusado empezó a golpearla hasta dejarla casi destrozada.

Pero las amenazas no cesaron, pues el 1 de julio, sobre las 18,35 horas, J.M.C. prendió fuego a la puerta de la víctima llegando a quemar el cuadro de la misma sin que se produjeran hechos de mayor gravedad gracias a la intervención de la Policía Nacional, que se personó en el inmueble para detener al ahora condenado, que portaba un mechero y unas tijeras y que con ellos presentes intimidó a la víctima, diciéndoles que "quería prender fuego y romper la puerta para así poder matar al vecino y que hasta que no lo matara no iba a descansar".

Para el Juzgado de lo Penal está probado, por todo lo anterior, el delito de amenazas, de la misma manera que el de daños, ya que se le ha ocasionado al perjudicado un perjuicio en el patrimonio por cuantía superior a 400 euros de forma intencionada. No obstante, cabe reseñar que en el fallo figura que el acusado padece trastorno de personalidad e ideas delirantes junto a un retraso intelectivo leve moderado que se ve agravado por consumo de tóxicos, lo que merma de forma considerable sus facultades intelectivas y volitivas.

Por su parte, J.M.C. negó en el acto del juicio los hechos, pero no lo hizo de forma contundente, puesto que negó amenazar a su vecino y, sin embargo, más tarde afirmó que "creía que no había ido a la puerta", sin rotundidad alguna. Además, aseguró que tomaba medicación desde los 17 años y que consume también cocaína, si bien apenas hubo preguntas por parte de la acusación ni de la defensa al no recordar "muy bien" lo que pasó y mostrarse dubitativo en las respuestas.

RELLANO CON RESTOS DE MADERA

De su lado, el afectado aclaró en la vista oral que otro vecino lo llamó alertándole de que se había encontrado la puerta de su casa destrozada y el rellano cubierto de restos de madera y de un incendio, toda vez que él se había tenido que ir de su vivienda a la vista de las continuas amenazas que estaba recibiendo. Así, este vecino testificó en el juicio que J.M.C. le había dicho que la víctima "intentaba envenenarle el agua" y que desde que se quedó solo el acusado, tras marcharse de la vivienda su madre, "los episodios son continuos y los vecinos están atemorizados".

Al respecto, la madre del acusado evidenció que su hijo tenía problemas con ese vecino "desde el tema de los ruidos" y que es consumidor de cocaína y heroína, si bien desde los 15 años está diagnosticado de esquizofrenia con trastorno bipolar que se agravó por el consumo de tóxicos, algo que corroboró el psiquiatra, quien consideró totalmente necesaria la medida de seguridad en un centro psiquiátrico penitenciario adecuado.

Así las cosas, el Juzgado de lo Penal número 1 de Jaén ha condenado a J.M.C. a su internamiento en un centro psiquiátrico durante un periodo de dos años, de igual forma que le ha impuesto por el delito de amenazas un año y tres meses de prisión, así como la prohibición de aproximarse en una distancia inferior a 200 metros a su víctima y comunicarse por cualquier medio durante el plazo de tres años.

En cuanto al delito de daños, le ha condenado a otro año de cárcel. Además, en concepto de responsabilidad civil, indemnizará a su víctima en un total de 1.386,48 euros por los daños causados a la puerta de su vecino.

europapress.es

Un hombre muerde a un agente al ser detenido en una medición de ruidos en Alava

Un hombre de 37 años y una mujer de 36 fueron detenidos el domingo por el delito de desobediencia y resistencia a la autoridad. Fue en la calle Los Herrán, cuando tras una medición de ruidos en la que dieron positivo, la Policía Local intentó notificar la misma a los dos arrestados. Decidieron no identificarse y uno de ellos agredió a un agente con un fuerte mordisco, por lo que éste tuvo que ser atendido en un centro sanitario. La pareja fue arrestada y pasará a disposición policial.

elcorreo.com

Condenan a un supermercado en Cádiz a indemnizar a unos vecinos por los ruidos

Un juzgado de Chiclana de la Frontera (Cádiz) ha condenado a un supermercado a indemnizar con 40.000 euros a dos matrimonios que vivían encima de sus instalaciones y que durante quince años sufrieron a cualquier hora los ruidos de su actividad.
Según ha informado hoy el despacho de abogados que ha llevado el caso, la sentencia ha dado la razón a los vecinos de este supermercado de la localidad gaditana de Conil de la Frontera, que, junto a otros habitantes del inmueble, llegaron a interponer 33 denuncias.
El caso, según el despacho de abogados Ortiz, se inició en 1995, cuando en la planta baja de un edificio de Conil ubicado en el número 7 de la calle Venenciadores abrió sus puertas una gran superficie de una cadena de supermercados.
Justo encima, en la primera planta, vivían dos jóvenes matrimonios que habían adquirido su primera vivienda, unos pisos nuevos y que pronto comenzaron a sufrir las molestias de la actividad del supermercado.
Según el abogado, todos los días de madrugada, sobre las 5 de la mañana, sentían la llegada de camiones proveedores y los ruidos de la descarga de la mercancía.
Los ruidos continuaban día y noche con "la llamada a los empleados por una potente megafonía de gran volumen", y unas "ruidosísimas alarmas de robo que por la noche se disparaban constantemente en falso", despertando a todos los vecinos, seis aparatos de aire acondicionado y "dos puertas eléctricas metálicas que producían al cerrar y abrir un enorme chasquido".
"Todo esto perturbaba la vida familiar de estos matrimonios, y los despertaba a las horas más intempestivas, llegando a sufrir problemas de irregularidad en el sueño y falta de reposo, así como enormes niveles de estrés, ansiedad, depresión e ira, por los que llegaron a ser tratados clínicamente", señala el despacho de abogados.

lavozdigital.es

martes, 29 de noviembre de 2011

La falta de sueño rompe los mecanismos que nos protegen de las enfermedades mentales

La falta de sueño afecta muy seriamente a la parte 'emocional' del cerebro y nos hace más propensos a las depresiones y a las enfermedades mentales. Según un reciente estudio del neurólogo de la Universidad de Berkeley Matthew Walker, publicado en el último número de 'Current Biology', dormir menos horas de las necesarias (de siete a ocho diarias) altera la capacidad de respuesta del lóbulo prefontal, la parte del cerebro que regula las emociones, y conduce a comportamientos 'irracionales y primarios'.

A tiempo para el cambio horario, y en declaraciones a Live Science, Matthew Walker asegura haber econtrado una nueva y poderosa razón para dormir: "El sueño restaura los circuitos emocionales, y haciendo esto nos prepara para los retos y las interacciones sociales del día siguiente. La falta de sueño, por el contrario, rompe los mecanismos que nos protegen de las enfermedades mentales".

El estudio de Walker, con el auspicio de la Harvard Medical School, se llevó a cabo entre 26 pacientes sanos, entre los 18 y los 30 años, que fueron dividos en dos grupo: los que durmieron lo suficiente y de una forma controlada, y los que fueron privados de sueño o incluso mantenidos despiertos durante 35 horas seguidas. Con la ayuda de un dispositivo de resonancia magnética (MRI), Walker visualizó las alteraciones en las conexiones del cerebro causadas por la falta de sueño.

"Normalmente se ha asociado el sueño insuficiente con un estado letárgico y poco reactivo", añade Walker. "Lo que hemos descubierto, sin embargo, es que la amígadla (el resorte del cerebro que mantiene las emociones bajo control) se vuelve hasta el 60% más reactiva. De alguna manera, es como si se produjera una reversión en el estado evolutivo del cerebro, que adopta un patrón de conducta más irracional, más primitivo".

El neurólogo de Berkeley afirma que su estudio ha probado que puede existir una conexión en la creciente falta de sueño entre la población y el aumento de las enfermedades mentales. "La cuestión de fondo es que el sueño no es lujo, sino una necesidad biológica para mantenernos emocionalmente sanos", agrega Walker.

Diversas investigaciones habían demostrado hasta ahora que la falta de sueño disminuye nuestra capacidad inmunológica, afecta al metabolismo y afecta gravemente a las capacidades de aprendizaje, de la atención a la memoria. El nuevo estudio pone por fin sobre el tapete la vertiente emocional, relegada hasta ahora a segundo plano.

Mary Carskadon, una psiquiatra de la Universidad de Brown que lleva tiempo estudiando la endémica falta de sueño entre los niños y adolsecentes norteamericanos, apunta que puede haber una estrecha relación entre el aumento de las depresiones y el comportamiento errático de la adolescencia y las insuficientes horas de descanso. "Lo que aún no sabemos", admite, "es si este problema tiene una incidencia directa en enfermedades mentales más graves como el desorden bipolar".


Diario el Mundo

lunes, 14 de noviembre de 2011

Las molestias de un local festero llegan hasta la denuncia de acoso inmobiliario

La vuelta, aunque solo por un fin de semana, de la actividad festera a Petrer reactiva un viejo problema de difícil solución: la convivencia del ocio de los festeros con los vecinos. El presidente de la asociación "Miguel Hernández", del casco antiguo, la zona más afectada por la gran afluencia de estos locales lo reconocía hace unas semanas, hay problemas por el ruido. Los partes de la Policía Local también lo evidencian cada semana.
Sin embargo, son unos vecinos de la calle Nicolás Andreu los que representan el caso más extremo. Precedida de una situación familiar complicada, la familia que ocupa el piso superior del número 4 de esta calle vio como el dueño del inmueble, un familiar directo, vendía la planta baja para la colocación de un cuartelillo hace años con la intención, aseguran, de echarles de una vivienda que poseen de forma legítima y por orden de un juez. Por ello, desde hace unos meses, mantienen una denuncia por acoso inmobiliario.
Al ruido que se genera de la actividad festera, además de insultos y vejaciones, según los habitantes del piso superior, se une los desperfectos que se han causado en el piso superior por las obras de adecuación. Existe un informe municipal que acredita dichos daños, pero la administración local no ha establecido sanciones.

Diario Información

miércoles, 9 de noviembre de 2011

En la ciudad de Los Ángeles se multará por ladridos molestos

La medida, que impone como límite que los perros ladren hasta 10 minutos, establece una multa de 250 dólares por la primera falta, en la segunda aumentará la sanción a 500 dólares y en la tercera la multa llegará a mil

El concilio de la ciudad de Los Ángeles aprobó una sanción económica, de hasta mil dólares, a los propietarios de perros que molesten a los vecinos con sus ladridos.

La medida, que impone como límite que los perros ladren hasta 10 minutos, establece una multa de 250 dólares por la primera falta, en la segunda aumentará la sanción a 500 dólares y en la tercera la multa llegará a mil dólares.

La iniciativa fue aprobada por 12 votos a favor y cero en contra en el máximo órgano administrativo de la ciudad. Fue enviada a la oficina del alcalde Antonio Villaraigosa, quien de ratificarla estará en vigencia antes de que concluya este año.

Los ladridos de los perros tanto en el día como en la noche causarán que sus propietarios sean sancionados y en la multa intervendrá el Departamento de Servicios Animales del condado de Los Ángeles.

La nueva disposición establecerá que después de 10 minutos de incesantes ladridos, o por 30 minutos intermitentes o más dentro de un periodo de tres horas, serán suficiente para aplicar la sanción.

Diario El Universal

lunes, 31 de octubre de 2011

El estrés aumenta por culpa de la contaminación acústica en las ciudades

Hasta el 20% de las personas que viven en zonas urbanas ruidosas sufren ansiedad o irritabilidad por el exceso de decibelios

El ruido no solo es molesto para los oídos, sino que resulta perjudicial para la salud física y psíquica del que lo soporta. Vivir en zonas urbanas donde hay bares de copas que cierran tarde o por ellas pasa una elevada cantidad de gente a lo largo de la noche se convierte en una verdadera tortura para los vecinos. Hasta un 20 por ciento de la población de las ciudades puede verse afectado por un estrés provocado por la contaminación acústica. Una de las consecuencia del alboroto nocturno es la imposibilidad de conciliar el sueño, con las consiguientes repercusiones negativas física y psicológicamente. El cuerpo necesita un descanso reparador. Cuando este se ve alterado, el organismo lo nota, sobre todo si la situación se repite con frecuencia y mantiene a las personas en vela casi continuamente.
Las dificultades para dormir están muy bien estudiadas médicamente, explicó a este periódico el jefe del servicio de psiquiatra del Hospital Clínico Universitario y coordinador autonómico de Salud Mental, Rafael del Pino. Tanto el cerebro como los procesos metabólicos del organismo precisan de siete a ocho horas de sueño para reajustarse. Cuando no se duerme bien, aparecen perniciosas secuelas físicas y psíquicas. Entre las primeras se enumeran el aumento de la presión arterial, el incremento del colesterol y la subida del ritmo cardiaco y de la frecuencia respiratoria. Psíquicamente, se desencadena un estrés por encima de los niveles normales, que se manifiesta con ansiedad, tristeza e irritabilidad. Esas emociones a veces saltan de una a otra por el llamado círculo del estrés, señaló el doctor Del Pino.
Otra consecuencia de la contaminación acústica es el insomnio por la noche y estar en un estado de tensión durante el día. Ambas manifestaciones van minando la salud de los afectados y les genera ansiedad y angustia ante la llegada de la noche, ya que son conscientes de que bullicio les impedirá conciliar el sueño como desearían hacer.
Camiones de basura
La gente que vive junto a bares de copas, donde se concentran numerosas personas, o en zonas de mucho tráfico padecen más los efectos desagradables del ruido, aunque a veces este se presenta por el estrépito creado por los camiones de recogida de basuras, los escapes libres de las motos o, simplemente, porque en la calle se mantiene una conversación a un nivel de voz muy por encima del aconsejado durante la noche. Precisamente, el insomnio es un trastorno que tratan con frecuencia los médicos de atención primaria en las consultas de los centros de salud. El ruido es uno de los motivos que imposibilitan dormir, aunque el insomnio también lo acentúan padecer dificultades sociales, laborales o de índole diversa.
«Hay personas que llevan el ruido peor que otras. El exceso de decibelios hace que se sientan sometidas a una tortura que les desencadena el estrés y los problemas físicos», señaló el psiquiatra. Añadió que la irritabilidad incide en que esos ciudadanos tengan tensión muscular, sudoración y aumento de la frecuencia cardiaca ante la imposibilidad de solucionar el problema, ya que su vivienda se encuentra situada en un lugar donde el alboroto es habitual y no hallan la forma de acabar con esa situación, lo que les provoca una mayor ansiedad e irritabilidad.
País muy ruidoso
Para agravar la cuestión, España está considerado como uno de los países más ruidosos del mundo. «Culturalmente, los españoles somos muy escandalosos y pensamos poco en que con ese comportamiento podemos molestar a los demás. Por eso, hacen falta muchas campañas de sensibilización positiva para mejorar las situación», precisó Rafael del Pino.
La primera causa de enfermedad por motivos ambientales es la contaminación atmosférica. El segundo lugar lo ocupa la contaminación acústica. «Este es un tema serio, como corrobora la propia Organización Mundial de la Salud (OMS), al que hay que darle más importancia y poner en marcha mecanismos para evitar esa contaminación acústica», subrayó el psiquiatra.

Diario Sur

miércoles, 26 de octubre de 2011

El Servicio de Mediación Comunitaria ayuda a solucionar conflictos de convivencia

En todos los barrios de la ciudad hay vecinos molestos que hacen cosas que nos desagradan. En la Zona Norte, cuando esto ocurre, pueden acudir a una persona que actuará de mediador en el conflicto y les ayudará a solucionar el problema. Se llama Servicio de Mediación Social Comunitaria, y lo viene prestando desde hace dos años la Concejalía de Acción Social dentro del Plan Integral de Recuperación de la Zona Norte de Alicante.
Soportar las fricciones y molestias propias de la convivencia vecinal no es algo que afecte únicamente a los habitantes de esa parte de la ciudad, pero en esos barrios se hace más necesaria la mediación porque son considerados vulnerables y, por tanto, más proclives a vivir situaciones de elevada conflictividad social. «Se ha creado allí y no en otro lugar simplemente porque es donde más se necesita», afirma la concejal de Coordinación de proyectos y responsable del Plan Integral de la Zona Norte, Sonia Alegría. «Son los barrios de la ciudad donde más se concentra la población inmigrante, donde más desempleados hay, y donde más casos tenemos de baja formación y absentismo escolar», explica la edil. «Los problemas vecinales en el resto de la ciudad quedan diluidos, pero aquí, por sus características especiales, tienen una incidencia muy superior».
La mayor parte de los conflictos en los que actúan tienen que ver con el incumplimiento de las normas básicas de convivencia: ruidos molestos, tirar la basura donde no corresponde, no respetar los horarios de descanso, o un uso indebido de los espacios públicos. En su mayoría son comunes a cualquier vecindario, pero en la zona Norte cambia la forma que se tiene de afrontar el problema por tratarse de barrios que parten de una situación de conflictividad social. «Una reunión de comunidad es, en cualquier lugar, un foco de tensión entre vecinos. Imagínense en una zona donde hay mucha gente que no ha sido educada en unas normas básicas de convivencia», explica Alegría.
El Servicio de Mediación Social Comunitaria presta a petición de los vecinos afectados por un problema de convivencia. Una vez recibida la solicitud de mediación, el equipo analiza si puede encargarse del caso o si deriva al solicitante a otras vías de actuación. En el caso de que el asunto sea susceptible de ser abordado por el servicio, se habla con las partes, se propician las reuniones que sean precisas para intentar llegar a un acuerdo, y, una vez logrado el entendimiento entre las partes, se realiza un posterior seguimiento y evaluación de la solución acordada.
Otro de los puntos de desencuentro vecinal propio de los barrios de la zona Norte tiene que ver con la elevada tasa de inmigración y de grupos pertenecientes a minorías étnicas. La convivencia en general es buena, a pesar de tanta diversidad de culturas, pero en ocasiones sí provoca situaciones de conflicto. Es el caso, por ejemplo, de las costumbres relacionadas con la práctica de algunos cultos religiosos. «En algunos casos, tras la celebración del culto, se concentra en la calle un gran número de personas cantando y tocando instrumentos musicales hasta altas horas de la noche», explica la concejal. Uno de los barrios donde más se da esta problemática es, según la edil, Colonia Requena.
Los mediadores también intervienen en conflictos de carácter familiar, desacuerdos entre arrendadores y arrendatarios, e incluso en asuntos relacionados con peleas, actuaciones llevadas a cabo por bandas, actitudes de falta de respeto o sospechas de comisión de delitos como robos o venta de drogas, aunque en estos casos lo que se suele hacer es orientar al solicitante hacia otros recursos más adecuados.
536 solicitudes
Este servicio municipal está cofinanciado por la Comisión Europea con cargo a los fondos Feder, y en el último ejercicio ha atendido un total de 536 solicitudes de mediación. Se encuentra ubicado en las dependencias del Centro Social de Virgen del Carmen, y en él trabajan dos mediadores y un coordinador. Este año se ha vuelto a sacar a contratación la prestación del servicio.
A comienzos de julio el Ayuntamiento resolvió el procedimiento a favor de la empresa Acuerdo Justo SC. El presupuesto asciende a 71.500 euros y el plazo de ejecución es de un año prorrogable a un segundo.
Para la concejal de Coordinación de Proyectos, Sonia Alegría, «es una de las iniciativas más importantes del Plan Integral de la Zona Norte porque lucha por rebajar los niveles de conflictividad y eso redunda en beneficio de una convivencia más pacífica». La edil destaca el interés y el esfuerzo de la mayoría de los vecinos de estos barrios por cambiar entre todos los hábitos que provocan problemas de convivencia.
«Hay mucha gente de la Zona Norte que lucha por conseguir una normalidad en esa convivencia como son las asociaciones de vecinos, colectivos de comerciantes, las parroquias, las ONG, las sociedades deportivas, los colegios o los institutos. Existe todo un entramado dentro de los barrios completamente implicado en el cambio», asegura.
El germen del Servicio de Mediación vecinal se encuentra en el llamado Equipo de Intervención Comunitaria puesto en marcha en el año 2000 por la Concejalía de Acción Social, con motivo del desarrollo del Plan Integral de Juan XXIII 2º Sector.
Entre otras iniciativas, ha trabajado en la constitución de comunidades de propietarios, ya que no existían en la mayoría de los edificios. En el 2007, con la entrada en vigor del Plan Integral de la Zona Norte, este servicio se hizo extensivo a todos los barrios incluidos en su ámbito de actuación. Ayudan a los vecinos a constituirse en comunidad y les ofrecen asesoramiento legal.
Gracias a ello, como en cualquier otro barrio de la ciudad, los vecinos pueden actuar frente al impago de las cuotas de la comunidad o toman acuerdos sobre temas de interés común de su edificio que todos los vecinos están obligados a cumplir.
El desarrollo del Plan Integral, puesto en marcha en el año 2007, ha permitido realizar una labor conjunta y coordinada entre las diferentes concejalías del Ayuntamiento de Alicante, y también entre el Consistorio y otras administraciones, como la Generalitat Valenciana o el Gobierno central.
Su objetivo global es lograr una mejora en las condiciones de vida de los habitantes de los barrios incluidos en su ámbito de actuación: Virgen del Carmen, 400 viviendas, Virgen del Remedio, Colonia Requena, Nou Alacant y Juan XXIII 2º sector. La Zona Norte, con alrededor de 40.000 habitantes censados, es una de las más populosas de la ciudad.
El 20 por ciento de los vecinos de la zona norte son inmigrantes, cuando la media en el con junto de la ciudad es del 11 por ciento, según el estudio poblacional que contempla el Plan Integral de la Zona Norte.
Además, hay un 20 por ciento de desempleo, y elevados niveles de pobreza y exclusión, ya que casi un cuarto de los usuarios de los servicios sociales de toda la ciudad residen en esta parte de la ciudad de Alicante.
La inseguridad es otro se los puntos débiles sobre los que se centran las actuaciones de este plan integral municipal. De hecho, el estudio previo al desarrollo del Plan reveló que el 43,4 por ciento de los vecinos de esta zona asegura que su principal preocupación es la inseguridad ciudadana de su entorno.

Diario la Verdad

El Síndic de Greuges pide control de los ruidos de una discoteca al Ayuntamiento

Casi un año después de que un grupo de vecinos entregara más de 200 firmas en el Ayuntamiento, para denunciar así las molestias ocasionadas por una discoteca, ubicada entre las calles Blas Valero y Doctor Caro de Elche, el Síndic de Greuges se ha dirigido a la administración municipal para recomendarle que adopte una serie de medidas correctoras.
Los afectados se quejaron en su día de que durante tres días a la semana, este local abría sus puertas por las noches y hasta bien entrada la madrugada y, durante ese lapso de tiempo, "muchos jóvenes beben, gritan, orinan, vomitan, se pelean, tocan a los timbres y dejan sus desperdicios en los portales", según afirmó en enero pasado una de las vecinas denunciantes.
Tras quejarse reiteradamente al Ayuntamiento y no estar de acuerdo con la respuesta municipal al respecto de este problema, los vecinos decidieron acudir a una instancia superior con el fin de verse amparados a su derecho a descansar.
El Ayuntamiento, no obstante, ya contestó a los primeros requerimientos del Síndic al asegurar que se habían realizado diversas comprobaciones y visitas de inspección "tanto por los técnicos municipales como por la Policía Local, la última de ellas con fecha 8 de febrero de 2011".
Tras requerir a la discoteca que subsanara las deficiencias técnicas detectadas y acatar ésta el requerimiento municipal, los vecinos insistieron en que el problema persistía, ya que los ruidos procedían de la aglomeración de gente en la calle. Ahora, el Síndic de Greuges ha recomendado al Ayuntamiento que los técnicos municipales inspeccionen de nuevo las actividades denunciadas para comprobar que se cumple con la normativa en materia de protección contra la contaminación acústica y medioambiental.
Además de llevar a cabo las mediciones pertinentes de los niveles de emisión de ruido, la recomendación del Síndic también incluye que se lleven a cabo "las medidas que resulten oportunas para paliar en la medida de lo posible las molestias que se ocasionan por la aglomeración de usuarios de la discoteca de referencia en las inmediaciones de la misma, conjugando con ello el derecho al descanso de los vecinos con el normal desarrollo de la actividad de referencia".
El Síndic de Greuges envió al Ayuntamiento esta resolución sobre la queja a principios del presente mes de octubre, con la invitación a que responda en el plazo de un mes si acepta las recomendaciones o, en caso contrario, explique las razones por las que no las admite.

Diario Información

lunes, 10 de octubre de 2011

Condenan en Valencia a una pareja a no vivir en su casa en tres meses por los ruidos causados

La Audiencia de Valencia ha condenado a un hombre y una mujer a no residir en su propia vivienda durante tres meses después de que sus vecinos de finca les denunciaran por las molestias y ruidos que causaban. La sentencia de la Sección Séptima confirma otra anteriormente dictada por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Mislata, contra la que los demandados interpusieron un recurso de apelación.
La comunidad de propietarios de la finca, ubicada en la localidad valenciana de Xirivella, demandó a la pareja por las "molestias y ruidos, sobre todo nocturnos", que provenían de su casa desde finales de 2006. Las quejas vecinales se plasmaron en diferentes actas de reuniones de la comunidad de propietarios, que llegaron a grabar los ruidos que se generaban en la vivienda.
La relación entre demandantes y demandados derivó además en un juicio de faltas por amenazas y agresión que acabó con sentencia absolutoria, y burofaxes y un acto de conciliación requiriendo a la pareja el cese del ruido denunciado. Las molestias cesaron durante algún tiempo pero se reanudaron en 2009, como continuaron denunciando los vecinos y consta en diferentes intervenciones policiales.
Según la jurisprudencia que recoge la sentencia, no está permitido al propietario u ocupante de un piso desarrollar en éste actividades prohibidas que resulten dañosas para la finca o contravengan las disposiciones generales sobre actividades molestas, insalubres, nocivas, peligrosas o ilícitas.
El juez ha considerado probado que las "actividades molestas, nocivas e ilícitas existen" en la vivienda de los denunciados desde el año 2006 y continúan a lo largo de 2009. Les condena, por ello, a la privación del uso de la vivienda de su propiedad durante tres meses y del uso del resto de elementos comunes y los derechos conexos a la propiedad durante este tiempo.

Diario la Verdad

viernes, 23 de septiembre de 2011

Decenas de quejas ante el Síndic por ruidos en Hogueras y fiestas patronales

Las Hogueras de Alicante, las Fallas de Valencia y las fiestas patronales han motivado gran parte de las quejas por molestias acústicas recibidas durante 2010 por la Sindicatura de Greuges, que ha instado a los ayuntamientos a mejorar su vigilancia sobre el cumplimiento de las licencias ambientales. A juicio del Síndic se trata de festividades "perturbadoras del descanso y la tranquilidad de los vecinos". La contaminación acústica es, con 129 quejas, el principal motivo de protesta por razones medioambientales en la Comunidad Valenciana, que denuncian sobre todo los ruidos que generan en el espacio público las fiestas patronales y verbenas.
El Síndic, José Cholbi, incide en la necesidad de aplicar "con el máximo rigor" el régimen de la licencia ambiental por parte de las administraciones locales, obligadas a imponer sanciones en caso de incumplimientos y califica de "desolador" comprobar que ayuntamientos como el de Aspe sigue sin sancionar a un local cuyos ruidos "impedían el descanso de una familia".

Diario Información

lunes, 19 de septiembre de 2011

La Policía irrumpe en una fiesta privada en la Albufereta ante las quejas vecinales

Vecinos de la zona de la Albufereta vivieron el pasado sábado una noche agitada. Agentes de la Policía Local tuvieron que intervenir hasta en cuatro ocasiones ante las quejas provocadas por una fiesta de alto copete celebrada por los vecinos de una finca de la calle Almadraba. Residentes de la zona manifestaron que no pudieron dormir y que denunciarán los hechos por tener a un Disc Jockey en el jardín de una urbanización hasta las 3.30 horas de la madrugada.
"En el jardín montaron un catering para cenar, lanzaron un castillo de fuegos artificiales... Todo correcto y de 'alto standing'. La sorpresa vino a medianoche, cuando un disc jockey comenzó a pinchar música a todo volumen, que se escuchaba desde las urbanizaciones y chalés de alrededor", explica Chiqui Fernández, vecino de la zona, que subraya que se trataba de un equipo sonoro "muy potente y profesional" .
A partir de entonces comenzaron las llamadas telefónicas de diversos vecinos a la Policía, ante la imposibilidad de dormir con la música de fondo. Fernández explica que los agentes, que llegaron a las 0.30 horas, se vieron obligados a saltar la valla, puesto que los organizadores no atendían al telefonillo, y una vez dentro, una responsable de la fiesta "alegó que estaba en una propiedad privada y que no pensaba detener la música, que la denunciaran". Fuentes policiales no confirmaron este extremo, aunque aseguraron que tuvieron que intervenir hasta en cuatro ocasiones. Según la Policía, los organizadores bajaban la música cuando llegaban, pero la volvían a subir cuando se iban.
Los vecinos anunciaron que iban a dar parte de los sucedido ante el ayuntamento o la Policía. "La única salida que nos propusieron los agentes es ir al registro del Ayuntamiento el lunes, pedir el informe policial e interponer una denuncia contra los responsables de la fiesta", afirma Fernández.
Fuentes policiales explicaron que la cuarta vez que se personaron en el lugar amenazaron con denunciar a los organizadores por desobediencia. Esta vez la advertencia surtió efecto y a las 3.30 la música paró y muchos vecinos pudieron, por fin, conciliar el sueño.

Problema de ruidos
La Albufereta y San Juan Playa sufren los fines de semana ruidos por otro tipo de fiestas, ya no privadas, sino realizadas en espacios públicos, así como aglomeraciones de jóvenes haciendo botellón.

Diario Información

sábado, 10 de septiembre de 2011

La Junta de Gobierno aprobará el Plan Acústico Municipal

La Junta de Gobierno aprobará, inicialmente, el Plan Acústico Municipal (PAM) de la ciudad de Alicante.

Este programa está diseñado por la Concejalía de Medio Ambiente dentro de las actuaciones dirigidas hacia un desarrollo sostenible, tal y como establece la Ley 7/2002 de la Generalitat Valenciana de Protección contra la Contaminación Acústica.

El PAM está constituido por un Mapa Estratégico de Ruido, que representa gráficamente el nivel de ruido ambiental en un área y en diversos horarios, así como por un Programa de Actuación o Plan de Acción cuya finalidad es proponer medidas correctoras y preventivas necesarias para atenuar o disminuir los posibles niveles de contaminación acústica.

lunes, 29 de agosto de 2011

Las fiestas de verano escapan a la ley del ruido

Las verbenas durante toda la noche impiden el sueño de miles de vecinos y turistas en busca de tranquilidad

Las multiplicidad de las normas y la permisividad de los alcaldes con las celebraciones de sus municipios dan carta blanca a que las verbenas en las comunidades de vecinos estén en marcha durante toda la noche al tiempo que impiden el sueño de miles de turistas en busca de tranquilidad.

La Generalitat impulsó en 2002 la Ley contra la Contaminación Acústica en la que se regulaba todo ruido producido por «actividades, comportamientos, instalaciones, medios de transporte y máquinas que puedan causar molestias a las personas» para cumplir con la normativa europea. Al mismo tiempo, dicha ley señala a los ayuntamientos como principales actores para hacer valer la ley mediante tres instrumentos: planes acústicos municipales, en los que se identifican las áreas acústicas; ordenanzas municipales, la normativa promovida por los consitorios; y las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS), que son aquellas en las que se producen unos elevados niveles sonoros debido a espectáculos o establecimientos, así como por el tráfico rodado.

Sin embargo, lejos de la realidad, todo este entresijo de normas y leyes que, a priori, deberían asegurar la salud y el descanso de los valencianos no sirve a efectos prácticos en la mayoría de casos. Todas las fiestas patronales y de interés turístico como pueden ser las Fallas, la Magdalena, las Hogueras de San Juan o, incluso, las fiestas patronales de los pueblos y sus respectivas verbenas y discos móviles estarían a salvo de la «ley del silencio».

El primer punto de la Disposición Adicional Primera de la normativa autonómica capacita a los ayuntamientos a «eximir, con caracter temporal, del cumplimiento de los niveles de pertubación máximos fijados en la ley a los actos de carácter oficial, cultural, festivo, religioso y otros análogas». Los niveles de los que habla la ley son de 65 dB(A) durante el día (8.00 a 22.00 horas) y de 55 dB(A) en la noche (22.00h a las 8.00 horas). Por ello, si se tiene en cuenta que las actuaciones musicales o los actos pirotécnicos superan los 100, el sueño de los vecinos está totalmente desprovisto de protección legislativa.

Así, durante el verano donde la mayoría de pueblos de la Comunitat Valenciana disfrutan de sus fiestas patronales o ferias la permisividad de los alcaldes se convierte en la pesadilla de los turistas y valencianos que buscan la tranquilidad y el relax.
A esta complicada situación se debe añadir, como ocurrió el pasado fin de semana en Cullera, que la falta de recursos impide que se cumpla la ley en un marco donde las incongruencias llegan hasta el punto de impedir que obras de rehabilitación de viviendas no puedan trabajar más allá de 4 horas al día sin restricciones mientras las fiestas de las comunidades de los vecinos están toda la noche en marcha, si no superen los 30 dB(A).

Diario Información

jueves, 25 de agosto de 2011

Denuncian la contaminación acústica que producen las máquinas de baldeo de calles

Vecinos de Benito Pérez Galdós y calles aledañas pasaron ayer la mañana encerrados para evitar el ruido ensordecedor de cuatro limpiadoras

Los vecinos de la céntrica calle Benito Pérez Galdós sufrieron ayer una jornada de todo menos tranquila. Empleados del servicio de limpieza de calles de Alicante se emplearon a fondo para dejar impolutas las aceras de esta vía y de las aledañas. Nada menos que cuatro máquinas de baldeo se afanaron en esta tarea, generando un intenso ruido que mantuvo durante dos horas a los vecinos en vilo.
«Es insoportable, no podemos tener las ventanas abiertas, con el calor que hace, porque el ruido es ensordecedor», explicaba uno de los residentes del número 37 de esta calle. «Toda la mañana metido en casa, encerrado a cal y canto en pleno verano», criticaba.
Los vecinos, que agradecen que el Ayuntamiento se interese por la limpieza de sus calles, no entienden, sin embargo, que sean necesarias tantas máquinas para el baldeo de las aceras y, sobre todo, denuncian la excesiva contaminación acústica que provocan. «Si midiésemos los decibelios ahora mismo, seguro que están por encima de lo permitido por la ley», gritaba, indignado, un residente, para hacerse oír por encima de las máquinas.
No es, ni mucho menos, la primera queja vecinal que origina el paso de este tipo de máquinas, a veces a horas bastante intempestivas.
Los vecinos del Centro de Alicante criticaban hace pocos meses que se baldean las calles en invierno a partir de las 06.00 horas, lo que interrumpe el sueño de los ciudadanos. Ayer, sin embargo, el servicio de limpieza no llegó a Benito Pérez Galdós hasta las 10.30 horas.
Al margen de los horarios más o menos adecuados, el problema de fondo es que se utiliza un tipo de maquinaria que es excesivamente ruidosa, por lo que los vecinos reclaman que se cambien por otras más modernas, que incluyan sistemas de amortiguación del ruido.

Diario la Verdad

sábado, 20 de agosto de 2011

Ruido excesivo o continuo

El excesivo o continuo ruido perjudica la salud física y psíquica de quien las padece y mucho más cuando son soportadas dentro de su propio domicilio, atentando y vulnerando derechos fundamentales como el derecho a la intimidad e inviolabilidad del domicilio (art. 18 C.E.), con arreglo a la interpretación mantenida por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos sobre el art. 8.1 del Convenio de Roma sobre “protección de derechos humanos y libertades fundamentales”, que sanciona el derecho a la vida privada y familiar, a la inviolabilidad del domicilio y correspondencia.


Nuestros tribunales han seguido fielmente la interpretación del TEDH sobre la protección que merece el derecho a la intimidad familiaren el ámbito domiciliario por contaminación acústica. Así la sentencia del Tribunal Constitucional 119/2001 recoge la doctrina del TEDH y establece (F.J. 5º) que el "ruido puede llegar a representar un factor psicopatógeno destacado en nuestra sociedad, como así lo acreditan las directrices marcadas por la OMS sobre ruido ambiental, cuyo valor como referencia científica no es preciso resaltar". De ello deduce (F.J. 6º) que "una exposición prolongada a unos determinados niveles de ruido que puedan objetivamente calificarse como evitables e insoportables, ha de merecer la protección dispensada al derecho fundamental a la intimidad personal y familiar, en el ámbito domiciliario, en la medida en que impidan o dificulten gravemente el libre desarrollo de la personalidad...”. Por ello la sentencia de 10 de mayo de 2005 de la Audiencia Provincial de Zaragoza dictamina que “la protección contra el ruido es la protección contra una agresión, que por más que la misma no tenga corporeidad, no pierde esa condición, y que tiene o alcanza protección de rango constitucional…”


Citando la Sentencia de la Audiencia Provincial de Córdoba de 27 de abril de 2004, fundamento jurídico octavo, que “…es hoy pacifico que las molestias generales por la percepción de inmisiones acústicas superiores a los niveles de tolerancia constituyen un daño moral extrapatrimonial indemnizable. Y es que, aunque de manera inmediata no representen un daño a la salud física o psíquica de quienes la padecen sino un peligro potencial para ella, su percepción origina estrés, dificultades para el reposo, la memorización, la concentración y la comunicación verbal, limitaciones en la capacidad de reacción y en el rendimiento del trabajo físico e intelectual, así como sentimientos de miedo, impotencia, malestar, ansiedad, desasosiego e irritación en su injusto padecimiento constituyen un verdadero daño moral. Como señala la T.S S. 31 de mayo 2000, la situación básica para que pueda darse lugar a un daño moral consiste en un sufrimiento o padecimiento psíquico.” Daño moral indemnizable, cuyo importe deberá ser cuantificado en cada caso, valorando la duración, intensidad y frecuencia de las inmisiones, el horario diurno y nocturno en el que se producen, así como, “la reacción mostrada por el inminente frente a las reclamaciones del afectado, no para anudar efectos primitivos a la indemnización, sino para compensar el mayor sufrimiento que a éste hubiera podido ocasionar la indiferencia o el desprecio que el autor hubiera evidenciado por la suerte de sus vecinos”.


Por tanto, el ruido antijuridico es condenable y las personas afectadas tienen amparo y protección constitucional ya que atañen a derechos tan relevantes como el derecho de intimidad personal y familiar (art. 18.1 C.E.); el derecho a la inviolabilidad del domicilio (art. 18.2 C.E); el derecho a la dignidad de la persona (art. 10 C.E.); a la salud (art. 43.1); y a un medio ambiente adecuado (art. 45.1).


Otra cuestión es determinar el límite de tolerancia acústica. Las normas administrativas suelen fijar límite máximo de ruido transmisible a las viviendas unos niveles de 35 dB(A) para el periodo diurno y 30 dB(A) para el nocturno (Art. 13 del Decreto 78/1999 de Protección Acústica de la Comunidad de Madrid). Deslindando el límite de inmisiones acústicas impuestos por las normas administrativas, las sentencias del Tribunal Supremo de 4 de marzo y 3 de septiembre de 1992 disponen que estas normas no son vinculantes para el tribunal civil, ya que pudiendo ser las inmisiones de ruido transmitidas a la finca colindante administrativamente correctas, son civilmente excesivas y molestas no teniendo el perjudicado el deber jurídico de soportarlas.

defectosconstruccion.com

jueves, 18 de agosto de 2011

66.000 alicantinos soportan ruido excesivo del tráfico

El ruido ocasionado por el tráfico en la provincia de Alicante ocasiona molestias a más de 66.000 personas, por las inmediaciones de cuyas viviendas discurren las vías con un mayor paso de vehículos al día. Según los estudios encargados por el Ministerio de Fomento y la Conselleria de Infraestructuras y Transporte para sus respectivas redes viarias, los afectados soportan ruidos por encima de los 55 decibelios, una cifra fijada como máximo aconsejable para zonas residenciales en la legislación autonómica. Durante la noche, esa intensidad máxima aconsejable del ruido se reduce a 45 decibelios; sin embargo, alrededor de 31.000 personas los sufren a causa del tráfico.

La directiva europea sobre ruido ambiental en vigor obliga a las administraciones públicas a elaborar mapas acústicos de sus redes de carreteras, para determinar cuáles son los puntos más sensibles y tratar de establecer medidas correctoras. La difusión de los primeros datos obtenidos por la Generalitat, a finales de 2009, ya reveló que casi 6.000 personas soportaban en la provincia ruidos superiores a 55 decibelios, con la ronda urbana de San Vicente del Raspeig a Sant Joan d'Alacant como la zona más delicada. Ahora, el Gobierno central ha hecho pública también la primera fase de sus estudios, que señalan a la autovía A-31 como la más conflictiva en cuanto a ruido.

En la citada vía, por la que a diario circulan más de 42.000 vehículos, el informe alude a la proximidad del trazado a los cascos urbanos de Villena, Petrer y Monforte del Cid. En estos tres municipios, los ruidos superiores a 55 decibelios afectan a 5.200, 4.200 y 2.400 personas, respectivamente; para 100 vecinos de Villena y Petrer, las molestias llegan a sobrepasar los 70 decibelios. La noche ofrece ruidos de más de 60 decibelios a 200 personas en Villena y a otras 100 en Petrer, que tienen con ello complicado el descanso.

Otra zona de especial sensibilidad es la carretera N-332 a lo largo de todo el litoral. En la mitad sur de la provincia, Torrevieja es el punto más conflictivo, ya que allí sufren ruidos superiores a los asconsejables 4.500 personas, y 2.500 durante la noche. Parte del tramo tiene ya instalada una barrera acústica, pero la elevada densidad de edificios complica la situación. Algo parecido ocurre más al norte, entre La Vila Joiosa y Altea. Esta localidad sufre las consecuencias del angosto paso de la carretera por el interior del casco urbano, con 3.000 personas afectadas por el ruido. Aquí se registran las molestias más intensas, puesto que 800 personas deben aguantar ruidos por encima de 75 decibelios.

También el ruido de los vehículos de la A-70 -con una intensidad de más de 70.000 vehículos- tiene consecuencias sobre los vecinos de Villafranqueza y los estudiantes de la Universidad de Alicante. La prioridad para corregir esos efectos en este último lugar se considera alta por parte del propio Ministerio, al igual que en Villena, Monforte del Cid y Torrevieja.


OTROS PUNTOS CONFLICTIVOS

P-7 (hacia Cartagena)

La proximidad de las viviendas de El Realengo y Las Heredades
La autopista hacia Cartagena discurre a escasos metros de las pedanías de El Realengo (Crevillent) y Las Heredades (Almoradí), con ruidos nocturnos de más de 50 decibelios. En menor medida, Catral también sufre estos problemas.

N-332 / AP-7
El Campello, acosado por el ruido del tráfico desde varios frentes
El casco urbano de El Campello soporta el tráfico de la travesía de la N-332 –aminorado desde la construcción de la variante– y, en algunas zonas, de la cercana AP-7. Más de un millar de personas deben soportar ruidos elevados durante la noche.

CV-725

Viviendas, un colegio y centros sanitarios entre La Xara y Dénia
Una de las carreteras autonómicas que genera más molestias por el tráfico que soporta es la CV-725 en Dénia, entre la entidad local menor de La Xara y la propia ciudad. Aparte de las viviendas, en la zona hay dos centros sanitarios y un colegio.

Diario Informacion

viernes, 5 de agosto de 2011

Vecinos de Sangueta denuncian el ruido que provoca una discoteca

La comunidad de propietarios del edificio La Marina, en la zona de Sangueta, ha denunciado en el Ayuntamiento la existencia de un local de música frente a su inmueble, en la avenida de Villajoyosa, que les impide conciliar el sueño por el elevado volumen de la música y de las voces de los clientes.
Los vecinos se lamentan de que vienen denunciando estas molestias desde hace diez años "sin que se adopten las medidas oportunas", y añaden que los responsables de la discoteca "vuelve a molestar al vecindario al colocar los altavoces fuera del local, en la zona ajardinada del mismo, y sin límite de volumen alguno, sobre todo los domingos por la tarde y noche".
El escrito, presentado en la Gerencia Municipal de Urbanismo, recalca que la anterior denuncia, en septiembre del pasado año, solicitaba una medición del nivel de la música y que se les remitiera una copia de la misma "pero no tenemos conocimiento alguno de las actuaciones" ni tampoco si se ha comprobado si el local se ajuste al proyecto que obtuvo licencia.

Quejas también
ante la Conselleria
Los vecinos del edificio La Marina han acudido también a la Conselleria de Gobernación para exponer sus quejas porque el Ayuntamiento "no ha hecho nada para solucionarlo". Este escrito, que se remonta a 2007, ya decía que los vecinos "sufrimos la música de discoteca hasta altas horas de la madrugada" y añaden que la Policía Local hizo una medición de decibelios "y se pasaban muchos", pero no solucionó el problema. En ese año, los vecinos indicaron a la Conselleria que tenían información de que este establecimiento de ocio carecía de permiso para música.

martes, 14 de junio de 2011

Piden 21 meses a la dueña de un bar de Granada por causar lesión psíquica con sus ruidos

La Fiscalía de Sevilla ha pedido una condena de 21 meses de cárcel para la dueña de un bar, a quien imputa un delito contra el medio ambiente por los ruidos que producía su local y dos delitos de lesiones psíquicas a los vecinos que se vieron obligados a soportarlos.
El escrito de la Fiscalía de Medio Ambiente sevillana, al que ha tenido acceso Efe, explica que la acusada R.M.F.V. explotó al menos entre 2008 y 2010 un bar de la calle Pino Carrasco de Esquivel, una pedanía de Alcalá del Río (Sevilla), que solo contaba con licencia para cafetería sin cocina y sin música.
En realidad se trataba de un bar que, bastantes meses antes de la licencia de apertura, ponía música a elevado volumen procedente de dos televisores sin limitadores acústicos, y que además causaba ruidos desde la vía pública pues la acusada emplazaba veladores en la calle que, aunque autorizados, invadían la calzada.
Además,el local causaba molestias acústicas procedentes de los equipos de aire acondicionado en una zona cuya calificación urbanística impedía la actividad de bares con música, por ser uso residencial para viviendas unifamiliares, añade el fiscal.
Una pareja que vivía sobre el local sufrió durante ese tiempo, especialmente en las noches y los fines de semana, "ruidos excesivos e intolerables" y unas molestias que la acusada conocía, debido a las "repetidas inspecciones de la Policía Local, alertada tras denuncias vecinales".
Mediciones sonométricas verificaron que en la noche del 24 al 25 de abril de 2009 el dormitorio de los denunciantes registraba 34,2 decibelios, cuando el límite reglamentario era de 30, y que el bar emitía 58,8 decibelios cuando el límite reglamentario por ser zona residencial era de 55, añade la acusación.
El local, además, tenía un aislamiento "claramente inferior al mínimo exigido".

Ideal.es

El Ayuntamiento de Zamora cierra un bar por ruidos para preservar la salud de los vecinos

El local se clausura definitivamente por la sentencia del TSJ que prima el «medioambiente» e «interés público» sobre la actividad privada

«Por fin se produce el cierre después de años pleiteando», declara el abogado de la comunidad de vecinos de la calle de Alfonso XII, número 5, José Nafría, que ya hace siete años consiguió una sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Valladolid favorable a la clausura del establecimiento. Los magistrados primaron «el derecho de los vecinos a la salud, a un medioambiente adecuado, a la intimidad personal y familiar», sobre el de un particular a ejercer una actividad económica. El local excedía el nivel de ruidos permitido por la Ley y no fue insonorizado, tras el primer requerimiento judicial, para evitar las molestias a los habitantes de los pisos superiores del edificio.


El TSJ, no obstante, ha tenido que emitir una segunda sentencia favorable a los vecinos para confirmar la dictada por el Juzgado Contencioso de Zamora, en la que la magistrada viene a reprender al Ayuntamiento por permitir que el establecimiento volviera a abrir sus puertas en septiembre de 2007 con otra licencia ambiental «en una zona acústicamente saturada», términos en los que se refirió el TSJ a esta parte de la capital en su primer fallo del año 2003.


El permiso municipal se dio por concedido en 2007 porque los propietarios no obtuvieron respuesta de la institución local a la petición de otra licencia municipal, circunstancia que beneficia a quien no obtiene contestación. Sin embargo, en este caso la licencia «no se puede adquirir por silencio administrativo» porque esa «actividad» que se pretende poner en marcha «es contraria a derecho», de acuerdo con el criterio de la magistrada del Contencioso, ratificado por el TSJ.


Aunque los vecinos esperaban que el fallo de Zamora bastara para que la institución local decretara el cierre inmediato del bar, lo cierto es que han tenido que esperar a que el Superior de Justicia de Valladolid ratificara dicha sentencia, hecha pública el 28 de enero de 2010, lo que ha tardado más de un año en suceder. Los titulares del bar han recibido el decreto municipal que informa de la «inexistencia de licencia ambiental para dicha actividad por sentencia judicial firme», es decir, que no podrá recurrirse. El letrado, José Nafría, vertió en su día críticas hacia el Ayuntamiento, «sorprendido porque se preocupe más por el derecho del empresario a abrir su negocio que por el de los vecinos a su salud y a disfrutar de un medio ambiente adecuado» e instó al equipo de Gobierno municipal a clausurar el negocio sin necesidad de que se pronunciara de nuevo el TSJ.

laopiniondezamora.es

miércoles, 8 de junio de 2011

Un vecino vincula la enfermedad degenerativa por la que murió su mujer con los ruidos del bar de abajo

Los primeros síntomas de la enfermedad degenerativa que acabó provocando la muerte de una vecina de la calle Magallanes de Santander los empezó a sentir un año después de mudarse a ese domicilio, en cuya planta baja se encontraba el bar 'La Red Cultural', hoy cerrado.

Así lo ha revelado el viudo de esta mujer en el juicio celebrado en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria contra los tres propietarios del local, acusados de un delito de contaminación acústica por el que les pide penas de dos años y medio de prisión para cada uno, condena que el Ministerio Fiscal llega a elevar hasta los cinco años de cárcel.

Si el matrimonio y sus dos hijos comenzaron a vivir en ese piso en junio de 2002, fue al verano siguiente cuando su esposa comenzó a sentir los primeros síntomas de ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica), el mismo mal que padece Stephen Hawking y que se caracteriza por la disminución del funcionamiento de las células nerviosas que controlan el movimiento de la musculatura voluntaria.

La enferma fallecería en octubre de 2008 y esos fueron sus primero síntomas, según ha insistido su esposo, quien ha tachado de "falsas y malintencionadas" las preguntas de las defensas sobre la existencia de indicios de esta mal degenerativo en 2001, y ha negado que hubiera antecedentes de ELA en la familia de su esposa.

El hombre, acusación particular en el juicio contra los tres propietarios del local, que ha concluido este miércoles, ha relatado cómo al mes de llegar comenzaron los primeros problemas con el bar, que estaba justo debajo de su piso, con suelo de madera.

Del local procedían los ruidos, la música y las vibraciones que le llevaron a realizar hasta cien escritos y llamadas telefónicas de denuncia, además de a un grado de tensión con los propietarios, uno de los cuales, en su versión, le agredió.

"no podía vivir"

"No podía vivir", ha manifestado el denunciante, que ha relatado como tanto él como su mujer tenían la oficina en el domicilio, y los ruidos del local les impedían también desarrollar su trabajo.

"No había forma de centrarse, era una situación insostenible, no podíamos trabajar con la elemental dignidad en la vida, se perdían clientes y la gente no quería saber nada", ha lamentado, reiterando en que a raíz de estos problemas el rendimiento laboral bajó y perdieron "muchos clientes".

Eran unas molestias que sólo sentían ellos, ya que eran quienes estaban encima del local, ha explicado.

El Ministerio Fiscal considera a cada uno de los tres acusados (J.R.S., C.G.B. y A.D.V.) responsable de un delito contra el medio ambiente, penado con cinco años de prisión y una multa de 13.500, además de indemnizaciones por valor de 6.300 euros, todo para cada uno de los acusados.

La petición de penas que hace la acusación particular, el perjudicado, es inferior: dos años y dos meses de prisión, un año de inhabilitación para actividades hosteleras e indemnizaciones de 14.000 euros, y, en el caso de la mujer, una cifra por determinar, pero no inferior a los 150.000 euros.

Esta parte también reclama, en caso de impago, la responsabilidad civil subsidiaria en las indemnizaciones del Ayuntamiento de Santander, al que reprocha que no adoptara "de forma tajante" medidas para la privación del ruido, en una actitud que califica de "tolerancia de una situación ilegal e injusta".


Diario 20minutos

domingo, 5 de junio de 2011

El presidente de Juristas contra el Ruido afirma que "los límites sonoros deberían ser más humanitarios"

Los desórdenes del sueño provocados por el ruido son los responsables de un buen número de trastornos, desde metabólicos a hipertensión y problemas cardíacos, según explica el doctor Eduard Estivill, famoso por sus obras de divulgación sobre el sueño en la infancia.

Estivill, que recibe hoy en Madrid el reconocimiento a su labor por parte de la Asociación de Juristas contra el Ruido, explica que con la contaminación acústica "el cuerpo puede entrar en sueño pero sin pasar del sueño superficial" y afirma que "lo peor es el ruido intermitente, como un coche al pasar".

Esto significa que quien sufre estos ruidos puede no ser consciente de despertarse, pero "es la causa más frecuente de falta de descanso en las grandes ciudades".

Estos "microdespertares", producidos en su mayoría por "estímulos acústicos que provocan en el cerebro el fenómeno denominado arousal, que significa alertamiento", llevan a la persona de una fase profunda del sueño a otra más superficial en la que no se descansa, afirma el doctor Eduard Estivill en un cuestionario remitido por correo electrónico.

Tras señalar que hay diferentes sensibilidades acústicas, añade que "se sabe que el cerebro es selectivo frente a distintos estímulos".

El ruido se convierte en algo "selectivo", algo a lo que se puede uno acostumbrar, cuando, por ejemplo, se produce el ronquido de una pareja, que puede rondar los 50 decibelios, lo que dobla el nivel de ruido recomendado en un dormitorio.

Estivill explica que "se ha descrito que el cerebro de una mamá con un recién nacido oye antes el llanto del bebé que el ruido de una tormenta".

El doctor cita los transtornos metabólicos y en la regeneración de la piel, así como los déficit inmunitarios, como algunos de los males físicos que pueden derivar de un descanso inadecuado, aparte de los que el ruido causa en sí mismo.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) alerta de que sólo el ruido derivado del tráfico en Europa causa el 1,8 % de los ataques cardíacos, además de provocar uno de cada cien casos de hipertensión, enfermedad que causa la muerte del 13 % de la población mundial.

Según fuentes del Defensor del Pueblo, la contaminación acústica motiva unas 500 quejas anuales.

El presidente de Juristas contra el Ruido, Joaquín José Herrera del Rey, ha explicado a EFEverde que "falta claridad en las normas y es necesaria menos tecnificación en las mismas", y ha calificado la normativa como "deshumanizada".

Ha afirmado además que "los límites sonoros deberían ser más humanitarios" ya que, por ejemplo, "los ciudadanos toleran mejor el ruido del tráfico que el del ocio, que es psicológicamente peor aceptado".

En este sentido, fuentes de la asociaciones vecinales de Madrid aseguran que ha habido personas que "han tenido que marcharse del Barrio de las Letras porque, pese a ser una zona mayoritariamente peatonal, no soportaban el ruido que ocasionaba el ocio".

El sentido común y el criterio de un policía local bastaría, según Herrera, para "solucionar el 75 % de esta problemática en nuestro país al darle potestad a los agentes para propugnar medidas cautelares a partir de 5 decibelios por encima de los límites legales".

El presidente de Juristas contra el Ruido aconseja: "No descarte en vender su piso si ve que su salud física y mental se deteriora".

Diario Informacion

jueves, 26 de mayo de 2011

Agrede a su vecino en una riña por el ruido

Un jubilado salmantino de 68 años, A.S.C.T, causó cortes con un navaja a su vecino durante una discusión originada por los ruidos que presuntamente hacía el agredido en su inmueble, en Salamanca. El agredido presenta lesiones en el antebrazo izquierdo provocadas al intentar defenderse del ataque del jubilado de las que fue tratado en el Hospital Clínico de la capital salmantina, donde permanece ingresado.

El periódico mediterráneo

martes, 24 de mayo de 2011

¿Cuál es el máximo de decibelios que se pueden tener en un piso?

Fisica: EL DECIBELIO.
Hablar de dB resulta como hablar de cuanta energía desprenderían 3 átomos de hidrógeno si tras pasar por un agujero negro se detonara contra el 5º sol de la Vía Láctea.

* Tabla de ejemplos de fuentes de emisión de sonido medidas en decibelios
(se pueden cotejar datos con marcas de electrodomesticos, enciclopedias, wikis, etc.)

Lavadoras 55 dB a 60 dB
Aire acondicionado hogar 35 dB a 45 dB.
Aire acondicionado oficinas y servicios 70 dB a 80 dB.
Aspiradora 80 dB 90 dB
Frigoríficos americanos 40 dB a 55 dB
Frigoríficos combis 30 dB a 35 dB
Ventilador ordenador sobremesa 25 dB
Viento en las hojas 20 dB
Olas en la orilla 40 dB
Respiración tranquila 10 dB
Biblioteca 20 dB
Susurro 10 dB
Dos personas cuchicheando 15 dB
Conversación normal 45 dB
Conversación a gritos 70 dB
Disputa 85 dB 100 dB
Restaurante con conversaciones 60 dB a 70 dB
Claxon de coche 100 dB a 120 dB

NOCIVIDAD EN NIVELES SONOROS Y TIEMPO DE EXPOSICIÓN

El umbral de dolor esta entre 110 y 120 decibeles. Sin embargo una exposicion de 8 horas a un sonido de 90 decibeles causa daño y si el nivel de sonido es 94 dB toma 4 horas en causar daño. Solo una hora si son 105 dB.

Legalidad: LEYES, ORDENANZAS Y NORMATIVAS.

Existen diversas leyes que abarcan el tema de la “Contaminación Sonora por Ruidos o Vibraciones”. Esta multitud de normas confluyen en el ámbito local y se desarrollan por las normativas y ordenanzas municipales.

Generalizando, en el territorio español y con poca diferencia de +-5 dB (pues se basan en los parámetros dictados por las leyes generales), las ordenanzas municipales marcan para los ruidos en dormitorios de viviendas 35 dB de 8 a 22 horas y 30 dB de 22 a 8. (dormitorios). en el resto de la vivienda poco más.

Vibraciones claramente perceptibles sin necesidad de aparato de medición … 0

En resumidas cuentas y sin hablar de civismo, socialidad, ética vecinal o cualquier otro tema que atañe a las relaciones vecinales:

- Los edificios según marca la normativa ISO de insonorizacion tienen aislamientos cuyos valores máximo son de 45 dB. Lo que no prevee la Ley de Ordenación de la Edificación LOE es que en la vivienda colindante exista una batería de percusión emitiendo rock and roll con picos de más de 140 decibelios.

- Aclarado el tema de ejemplos en la tabla de decibelios… Las normativas municipales consideran transgresión contra la salud y el bienestar social el superar los 35 dB diurnos o 30 dB nocturnos en zona residencial – específicamente en dormitorios. Lo que simplemente quiere decir que si al vecino le llega algo más que el susurro del ventilador de un ordenador se está atentando contra su salud y su bienestar.

- Como último punto aclarar: 35 dB no es el valor emitido por un avión a reacción sino el de un aire acondicionado silencioso. El valor permitido de vibraciones en casa ajena y percibidas sin necesidad de instrumento de medición es 0. Las llamadas por algunos “leyes antisociales” que prohiben dañar la salud y el bienestar de las personas SI SON LEYES ANTISOCIALES pues se aplican a estas PERSONAS ANTISOCIALES y ANTICÍVICAS.

Dudamos.com

lunes, 23 de mayo de 2011

"EL RUIDO PROVOCA SERIOS DAÑOS EN LA SALUD ". Notas sobre el Seminario médico sobre el Abordaje Multidisciplinar de la Contaminación Acústica

El día 14 de abril de 2011 la Dra. Isabel Lorenzo publicó en la web de la Plataforma Estatal Contra el Ruido – PEACRAM - una reseña, a modo de conclusiones, referente al “ I Seminario sobre el Abordaje Multidisciplinar de la Contaminación Acústica

Este es el enlace (1) para ver el programa, que, como se puede apreciar, fue amplio, riguroso y tratado por ilustres y muy expertos ponentes de esferas médicas, del derecho y de la ingeniería y la Universidad.


Daños a la salud por ruido

  • Introducción y conceptos básicos: definición de ruido, tipos, escalas de medición, mapas de ruido.
  • Efectos agudos y crónicos del ruido sobre la capacidad auditiva.
  • Efectos psicopatológicos y efectos a corto y largo sobre el sueño. Efectos agudos y crónicos de la falta de sueño.
  • Efectos sobre el comportamiento, el rendimiento intelectual y el aprendizaje.
  • Efectos cardiovasculares.
  • Ruido, estrés crónico y cáncer.

Tratamiento médico y jurídico de los daños por ruido

  • Prevención y tratamiento de la hipoacusia de origen ambiental
  • Normativa y Legislación estatal y autonómica en el ámbito laboral y doméstico.
  • Condiciones técnicas para la correcta medición del ruido. Informes periciales.
  • Abordaje de la contaminación acústica desde el punto de vista sociológico y vías de defensa no judiciales.
  • Vías judiciales para luchar contra la contaminación acústica y Jurisprudencia

Probablemente, el factor individual que más daños en la salud de las personas ha acarreado en la historia de la Humanidad ha sido siempre LA IGNORANCIA. Y, probablemente el segundo lo haya sido el interés económico de unos pocos, habitualmente los fabricantes y distribuidores del producto nocivo, a los que, en demasiadas ocasiones, hay que sumar los estamentos del poder político o social.

La historia del tabaquismo es muy ilustrativa y en muchos puntos coincidente con la historia de la contaminación acústica, llegando ambas de la mano de la Revolución Industrial. La diferencia fundamental es que la lucha contra el hábito tabáquico lleva cuatro décadas de ventaja y que su responsabilidad del número de víctimas mortales, que supera a las causadas por las dos guerras mundiales juntas, es ya absolutamente incuestionable.

Pese a todo ello, la legislación reciente para protección de las víctimas inocentes del tabaco (los fumadores pasivos) ha llegado cargada de polémica: no se debe, pues, esperar mejor suerte para con los problemas derivados de la contaminación acústica. O quizás sí, aprovechando las enseñanzas que la lucha contra el tabaco nos ha aportado, y que las nuevas tecnologías permiten que las voces de los consumidores finales se escuchen de otra forma. Si quieren.

La mayor parte de los daños que sobre la salud provoca la contaminación acústica son desconocidos por la población y absolutamente menospreciados por nuestros gobernantes y nuestras autoridades sanitarias.

Cuando organizamos este Seminario lo hicimos con la intención de concienciar a los profesionales médicos, principalmente a los médicos de Familia y a los pediatras de los Centros de Salud, de la importancia de reconocer la patología causada por la exposición aguda y crónica al ruido, de modo que no hay que limitarse a tratar los síntomas de sus consecuencias, sino que el enfoque correcto pasa por identificar, reconocer y contribuir en la medida de las posibilidades a la eliminación de la causa.

Si la contaminación acústica nocturna impide dormir y descansar adecuadamente a un ciudadano en su domicilio, éste terminará desarrollando insomnio crónico, ansiedad, astenia (fatiga, cansancio crónico), depresión, somnolencia diurna, mermas importantes en su capacidades cognitivas y de concentración... Sin embargo, si acude a su médico, es muy probable que éste se sienta inclinado a prescribirle somníferos, ansiolíticos y antidepresivos, que contribuirán a incrementar el torpor mental del afectado y no mejorará en absoluto el problema.

Ciertamente el médico no podrá recetar la erradicación del problema de contaminación acústica, pero sí podrá analizar detenidamente el caso y realizar un informe certificando que los problemas de insomnio/ansiedad/depresión/ fatiga crónica etc. Comenzaron en fecha concreta, empeoraron en fecha concreta y llevaron a un ciudadano previamente sano a un estado lamentable. Es posible que el ciudadano deba recurrir a las a las vías administrativas y legales pertinentes para lograr que la causa de su mal cese, pero volcar sobre el individuo la responsabilidad sobre su propia salud cuando que la noxa le viene impuesta desde el exterior y medicalizar un proceso que no es médico sino ambiental, y habitualmente evitable, constituye un pésimo comienzo que nunca, o casi nunca, logrará tratar la raíz del problema: la clave del tratamiento eficaz de las consecuencias para la salud de la contaminación acústica no son los medicamentos.

La repercusión sobre la salud de la exposición ambiental al ruido es amplísima, bien sea directamente o bien a través de los mecanismos desencadenados por el estrés crónico. La Organización Mundial de la Salud acaba de publicar dos documentos altamente recomendables que pueden descargarse gratuitamente de su página web:

  • La contribución del ruido medioambiental al deterioro de la salud: cuantificación de los años de salud perdidos en Europa” (2), de 2011, disponible en:
  • El ruido nocturno, guías para Europa” (3) de 2009, disponible en

Que informan ampliamente de todos estos aspectos, ampliando y actualizando las conocidas “Guidelines for community noise” (4) del año 1999.

En el caso de los niños, la situación es dramática, no en vano han sido definidos como población especialmente sensible por la Organización Mundial de la Salud, definición que reitera, amplía y justifica con nuevos datos en estos nuevos informes. La hiperestimulación continua que les supone la exposición crónica a ruido y la privación o la interferencia en las imprescindibles horas de sueño nocturno, podrían jugar un papel fundamental en múltiples trastornos que con frecuencia creciente les afectan, tales como la merma en sus capacidades de concentración, de aprendizaje y de iniciativa, y el empeoramiento o desencadenamiento de procesos psiquiátricos serios como el síndrome de hiperactividad con déficit de atención, los trastornos desafiantes, y en general, el desarrollo de conductas violentas, desinhibidas, transgresoras, pendencieras y en general a la faltas de autorregulación y autocrítica, cuando además existe asociado (muy frecuente) una deficiencia crónica de horas de sueño reparador.

Nos fue difícil conseguir que los profesionales médicos consideren la contaminación acústica como un problema de salud de primer nivel; en parte ello se debe a que estamos absolutamente desbordados por problemas acuciantes tales como la patología derivada del envejecimiento poblacional, las enfermedades cardiovasculares, y el cáncer, verdaderas epidemias por su mortalidad del siglo XXI.

En cuanto a la atención espontánea de los medios de comunicación, nos ha resultado sorprendente: la prensa radiofónica se ha volcado con el Seminario, de modo que no ha faltado emisora local e incluso nacional (la Cadena SER, por ejemplo) que no hayan radiado entrevistas a diferentes ponentes o resúmenes del Seminario. También la TV local, tanto la TVG autonómica como Localia, han realizados sendos apartados sobre el tema, por lo que el objetivo de difusión sí se consiguió.

En los días siguientes se han realizado entrevistas a diversos ponentes, algunas de ellas aun no se han publicado y otras se han ampliado y se han publicado de forma diferida, lo que demuestra que existe una preocupación creciente de la opinión pública por estos temas.

Alguna entrevista de la prensa escrita , como la que en esta web ( de PEACRAM) se ha recogido, al margen de alguna pequeña inexactitud y el necesario resumen de toda la información que se proporcionó (la entrevista duró casi una hora de intercambio de información) refleja las líneas esenciales de lo que fue el Seminario.

A modo de ejemplo, puedo pormenorizar explicaciones sobre las siguientes:

  • "Se detectan (en los jóvenes) hipoacusias más precoces por aparatos de música, y en el caso de los niños más pequeños, por juguetes con un volumen alto" es de "por encima de los 70-75 decibelios"
  • El ruido es un factor estresógeno de primer nivel, y el propio Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos tiene abierta una línea de investigación de sus efectos sobre la incidencia y la supervivencia al cáncer; parece que los efectos podrían ser más notorios en cánceres hormonosensibles, tales como el cáncer de mama o el cáncer de próstata, pero este efecto todavía no es cuantificable.
  • El ruido dentro de un pub sobrepasa los 90 e incluso los 100 decibelios, cuando que en el interior de una casa el volumen de la vida doméstica diurna normal oscila entre los 50 y los 60 decibelios
  • Los límites marcados por la legislación (autonómica, que no se ha adaptado aún a la nacional) son 55 decibelios en el exterior y 30 en el interior durante la noche (en la legislación nacional, el límite en lo dormitorios es de 25 decibelio durante la noche)

En cuanto al comentario que se resumió diciendo que los efectos de la privación de sueño tienen los mismo efectos sobre el cerebro que la intoxicación alcohólica aguda, merece la pena desarrollarlo con un poco más de detalle.

Estos datos proceden de una revisión publicada en el año 2009 en la prestigiosa revista médica "CHEST", que analizaba diferentes estudios realizado sobre los efectos de la interferencia y la privación de horas de sueño en médicos internos residentes (5), se obtiene conclusiones tan sorprendentes como alarmantes.

  • Así, a partir de las 10 horas de vigilia el cerebro empieza a dar signos de fatiga, cometiendo errores, al principio muy leves e imperceptibles, de modo similar a los que cometería si el sujeto hubiese ingerido una pequeña cantidad de alcohol. Cada hora de vigilia adicional causa un daño cerebral equivalente a un incremento progresivo de la tasa de alcoholemia del 0,04% y a las 24 horas, el cerebro se comporta como el de una persona sana en estado de intoxicación alcohólica aguda
  • Si al salir de una noche de guardia, los residentes conducen su coche hasta casa, su tasa de accidentes de tráfico se dobla o se triplica, pero si además se quedan a trabajar otra jornada y después conducen, entonces su riesgo de accidentes de tráfico se multiplican por 5
  • La deprivación parcial del sueño, a menos de 6 horas por noche, resulta en despistes más o menos graves, ánimo depresivo y decremento en la capacidad de aprendizaje; en menos de dos semanas, la pérdida en la capacidad de vigilancia es similar a la observada en 24 horas continuas de vigilia. Un hecho particularmente inquietante fue que, mientras en los test objetivos se apreciaba la merma de las capacidades, en los test subjetivos, los jóvenes médicos mostraban aclimatación, de modo que ellos mismos eran incapaces de percibir su lamentable estado a pesar de las pruebas objetivas que mostraban su deterioro.

No quiero cansar, ni es el objeto de este comentario hacer una revisión extensa del tema desde el punto de vista médico, ya que se están elaborando conclusiones específicas del mismo que podrán consultarse en la web del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de la provincia de Pontevedra.

El artículo de la revista "CHEST" tiene 9 páginas repletas de datos de este tipo, y existen cientos de trabajos científicos adicionales que demuestran las graves consecuencias que la privación del sueño acarrea de forma tanto aguda como crónica. El sueño es una necesidad básica, como comer, beber o respirar, y si a un sujeto se le priva de él, sufrirá un daño cerebral grave y progresivo y después morirá.

Si en España la cuarta parte de la población está expuesta a niveles de ruido por encima de lo recomendado por la OMS (en la ciudad de Vigo es el 50% de los habitantes), hay que apreciar otra dimensión del problema: el ruido que impide conciliar el sueño o descansar adecuadamente no es una simple molestia, sino que puede matar. Es imposible cuantificar en cuantos accidentes de tráfico, en cuantos accidentes laborales, cuantas conductas violentas, cuantos despistes, cuantos errores médicos, peatonales, domésticos... se hubieran evitado si los niveles de ruido no estuviesen dañando a la cuarta parte de la población; tampoco puede estimarse cuantos casos de ansiedad, depresión e insomnio podrían dejar de tratarse con psicofármacos si, sencillamente, se obligase a respetar la ley y nadie estuviese expuesto contra su voluntad a los efectos de la contaminación acústica.

El anteriormente mencionado documento de la organización Mundial de la Salud del año 2011, sí entra a estimar potencialmente los años de vida perdidos debido a muertes prematuras y los años de vida 'saludable' perdidos por discapacidad o enfermedades derivadas de la contaminación acústica medioambiental, y arroja nada menos que las cifras siguientes: por el ruido ambiental se pierden 61.000 años debido a enfermedades isquémicas del corazón, 45.000 años por daño cognitivo en los niños, 903.000 años por problemas de sueño y 22.000 años por tinitus en los países de Europa.

Más allá de esta cifra, en la parte más vulnerable de la población, los niños, tampoco es posible cuantificar cuantos casos de conductas agresivas y violentas, comportamientos inadecuados y desafiantes, hiperactividades, bajo rendimiento escolar, aislamientos, problemas de relación social y de inadaptación y un largo etcétera, podrían evitarse si pudiesen vivir en ambientes más tranquilos y no saturados acústicamente.

Existen dos características particularmente turbadoras en el caso de la contaminación acústica proveniente de las actividades de ocio: la primera es tener constancia de que la legislación que existe es muy protectora y el problema radica en que los organismos de la Administración pública encargados de velar por su cumplimiento no lo hacen; la segunda es que se trata de causas evitables y erradicables en el 100% de los casos. Por ello, cuando el ruido nocivo proviene de actividades de ocio, se añade otro factor altamente estresógeno: la injusticia percibida.

Desde el punto de vista médico, la lucha contra la contaminación acústica debe desarrollarse en tres frentes:

  • uno, el de mejorar y depurar los conocimientos del daño en la salud que provoca el ruido;
  • dos, en transmitir la información a los ciudadanos para que puedan protegerse mejor;
  • tres, influir sobre las autoridades sanitarias para que obliguen a adoptar las medidas oportunas que garanticen la salud pública

Este es el largo camino que se ha seguido para intentar erradicar otras ponzoñas deletéreas de la sociedad moderna tales como muchos pesticidas, productos químicos y ¡ el tabaco !


Castellon sin ruidos

domingo, 22 de mayo de 2011

Una falla pagará 2.000 euros a unos vecinos por el ruido del casal

La comisión celebró verbenas, play-backs y cumpleaños «sin horario razonable y con conocimiento de las molestias»


Las relaciones entre vecinos y falleros, en ocasiones, son algo tormentosas. No son pocas las veces en las que la convivencia desemboca en los tribunales. En la inmensa mayoría de los casos se trata de molestias causadas por ruido. La sentencia de la Audiencia Provincial de Valencia confirma una vez más este problema. La falla Conserva pagará 2.000 euros por los daños morales causados a unos vecinos del inmueble. El tribunal confirma de esta manera la decisión del juzgado de primera instancia, que también falló a favor de los perjudicados.
La comisión se encuentra en la calle Berenguer Mallol donde tenían alquilado en el momento de los hechos un bajo del citado inmueble. Desde enero de 2009 hasta mayo del 2010, la falla causó molestias acústicas a los demandantes. Los vecinos reclamaban, además de la indemnización, que insonorizaran las instalaciones. Ahora esto último ya no será necesario.
La falla, en cambio, negaba que hubiera causado ninguna molestia y que, en todo caso, estas no estaban acreditadas. Es más, sostenía que todo era una venganza de los residentes, quienes tiempo atrás habían pertenecido a la junta directiva de la comisión. Alegó que les movía «el resentimiento y el rencor».
La Audiencia analizó por separada cada una de las cuestiones que proponía la falla. Respecto a las molestias, el tribunal considera probado que en el bajo se realizaron actividades que produjeron «molestias». Y no solo por las declaraciones de los afectados sino por la comunidad de propietarios, la Policía Local y el Ayuntamiento, se acredita que se celebraron verbenas, concursos de paellas, play-backs y cumpleaños «sin sujeción a un horario razonable y con pleno conocimiento de las molestias».
De igual forma consta la intervención de la Policía Local y las mediciones acústicas de un laboratorio. Respecto a los datos -tomados el día de la presentación de la fallera mayor- se encuentran muy por encima de los niveles autorizados por el Ayuntamiento.
La Audiencia también considera la indemnización «razonable». De hecho, en los escritos que acompañaban la denuncia se demuestra que los vecinos estuvieron sujetos a «una situación de tensión provocada por los ruidos que provocó limitaciones en las horas de descanso». Además, tal y como subraya la sentencia, el hecho de que aceptaran el dinero en primera instancia demuestra que lo que verdaderamente perseguían «era el cese de la actividad del local».

Diario las Provincias

sábado, 21 de mayo de 2011

Un teléfono 24 horas para quejas por el ruido

El candidato socialista a la Alcaldía, Jaime Lissavetzky, ha propuesto hoy un servicio de teléfono de 24 horas para atender a las quejas de los ciudadanos contra el ruido.

Este teléfono será "de tres dígitos" y funcionará permanentemente, ha dicho Lissavetzky, quien ha anunciado que, como medida complementaria, equipará a los agentes de la policía municipal con sonómetros para puedan medir la contaminación acústica de cada zona.

Estas dos propuestas forman parte del programa de protección medioambiental del PSOE para la ciudad de Madrid, que Lissavetzky ha explicado hoy durante un paseo por la Casa de Campo, para la que pide un Plan Especial de Protección, Uso y Gestión.

Diario ABC

El mapa acústico de Vitoria costará 100.000 euros

El ferrocarril, el aeropuerto, las carreteras de mayor tránsito, el tráfico viario y la zona industrial. Ésas son «las principales fuentes» sonoras que reflejará el Ayuntamiento vitoriano en su nuevo mapa del ruido, que prevé tener listo «para 2012». De hecho, el Gabinete Lazcoz aprobó ayer mismo en Junta de Gobierno Local una partida de 100.000 euros para la contratación de este estudio.
El informe, que, como novedad, «abarcará todo el término municipal y no sólo el casco urbano de Vitoria», avanzó el alcalde, Patxi Lazcoz, permitirá evaluar las diferentes exposiciones al ruido existentes, además de servir de «punto de partida» para el diseño de un plan de acción con el fin de rebajar la contaminación acústica de sus calles y carreteras. Las propias instituciones europeas exigen la elaboración de este mapa, aunque la fecha impuesta para ello, y como límite, es 2013. La capital alavesa se adelantará y lo tendrá un año antes.
«Derecho ciudadano»
El regidor advirtió de que el ruido afecta de manera directa al día a día de los vecinos y señaló que, en un futuro, su control «formará parte de los derechos ciudadanos». El nuevo mapa, que a diferencia de los anteriores dibujará todo el municipio, entra «dentro de las políticas ambientales» llevadas a cabo por el Consistorio y cumple con la apuesta municipal «de seguir mejorando la calidad de vida de la ciudadanía».
El Ayuntamiento, eso sí, trabaja desde hace tiempo en el control de la contaminación acústica a través de acciones como «el Plan de Movilidad y la consecuente reducción del ruido derivado del tráfico», recordó Lazcoz.

El correo

jueves, 19 de mayo de 2011

Bares sin humo, noches de insomnio









PINO ALBEROLA La polémica por la ley antitabaco se ha trasladado del interior de bares y restaurante al exterior de los mismos. Y es que, en los últimos meses, el número de denuncias por ruido en la calle durante la noche se ha disparado en la ciudad de Alicante. «Desde el pasado mes de enero cada día recibimos varias quejas por este problema, cuando antes era algo más bien excepcional», señalan fuentes de la Unidad de Aperturas y Disciplina Urbanística del Ayuntamiento.

La situación ha provocado que algunos establecimientos, como un bar ubicado en la calle Médico Pascual Pérez, hayan tenido que poner en la entrada carteles que piden: «Por favor, moderad el volumen de vuestras conversaciones. Respetad el descanso de los vecinos».

Los residentes del Casco Antiguo son los más perjudicados por esta situación. «Cuando por fin conseguimos que los pubs instalaran la doble puerta para amortiguar el sonido, ya no sirve de nada, porque como la gente entra y sale constantemente la música se oye a todo volumen», señala María Dolores Peretó, presidenta de la Asociación de Vecinos del Casco Antiguo. Un problema al que se suma «el enorme botellón en que se ha convertido el Barrio los fines de semana, porque la gente consume alcohol en la calle para poder estar fumando».

Reunión con la Policía Local

Los residentes de esta zona de la ciudad se han reunido esta semana con la Policía Local para explicarles la situación en la que se encuentran. «Nos han prometido que las diferentes unidades vigilarán que las puertas de los pubs se mantengan cerradas y que se cumpla con la normativa de no consumir alcohol en la vía pública». Peretó reclama una «solución rápida, porque es imposible dormir y nos sentimos como si hubiéramos vuelto a empezar con nuestras reivindicaciones contra el ruido». Por su parte, los propietarios de los bares de esta zona de la ciudad se sienten atados de manos ante el problema. Ignacio Cardona, presidente de la asociación que representa a este colectivo, asegura que la situación «es inevitable, ya que el tabaco no se deja de un día para otro y si la gente no puede fumar dentro de los bares lo hará fuera». Aunque la inmensa mayoría de los locales cuentan con un portero, éstos únicamente «pueden llamar la atención cuando alguien grita de demasiado, pero poco más pueden hacer. Nosotros tenemos potestad de puertas para dentro del bar, lo que ocurre fuera no podemos evitarlo».

Más inflexible se muestra respecto a que se consuma alcohol en la calle. «Es ilegal y en eso somos muy estrictos. No dejamos sacar copas a la calle bajo ningún concepto». El representante de los empresarios del Casco Antiguo asegura que «queremos colaborar con los vecinos para solucionar este problema» y añade que «estaríamos encantados de que se multase a las personas que consumen alcohol en la calle».

Diario Información

viernes, 13 de mayo de 2011

Los edificios cercanos a la estación intermodal pueden sufrir grietas y ruidos durante su construcción


El candidato a la Alcaldía de EU, Miguel Ángel Pavón, considera que las precauciones que tomará Adif para evitar grietas en edificios por las obras del soterramiento de vías son «otro motivo más para descartar» esta solución «en favor del retranqueo de la estación intermodal», un retranqueo que han incorporado a su programa municipal como «único modo de disponer a corto plazo de un gran parque central arbolado y una estación intermodal conservando además los silos de San Blas, el puente rojo y la estación de Madrid y sus pabellones ferroviarios anexos».
A todo ello se suma, dicen, «el posible riesgo de afecciones, como grietas, sobre los edificios próximos al soterramiento, a consecuencia de la prolongación del túnel existente hasta pasar el actual paso a nivel sobre las vías», desde donde el tren discurrirá en trinchera hasta llegar a la estación provisional proyectada para la llegada del AVE.
A estas posibles afecciones se sumarán, indica Pavón, «las fuertes molestias en forma de ruido que sufrirán los vecinos a consecuencia de las obras, por lo que piden a Adif y Avant que se planteen el retranqueo de la estación.

Diario Las Provincias